Mensaje del Rector Mayor a la Familia Salesiana
Ante la
elección del Papa Francisco, el Rector Mayor de los Salesianos, Don Pascual
Chávez Villanueva, se dirige a la Congregación y a la Familia Salesiana un
mensaje que confirman los lazos de los Hijos de Don Bosco con el sucesor de
Pedro.
Mensaje
a los Salesianos y a todos los miembros de la Familia Salesiana
He tenido
la gracia de haber estado presente en la Plaza de San Pedro, repleta de miles y
miles de personas, especialmente jóvenes, en el momento en el que hemos
escuchado el mensaje que tanto esperábamos:
"Annuntio vobis gaudium magnum.
Habemus Papam
Georgiumg Marium Bergoglio
qui sibi nomen imposuit
FRANCISCUM".
Aunque su nombre no había sido mencionado entre los
papables, y que por tanto causó perplejidad en aquellos que no sabían de quien
se trataba, la acogida del Nuevo Sucesor de Pedro no se hizo esperar, y la
primera respuesta fue un grandísimo aplauso, expresión de una gran alegría,
acompañada de los primeros gritos: Francisco, Francisco, Francisco…
Una
vez más, ha sido el Espíritu Santo quien ha guiado a los Cardenales electores
en la elección del Hombre que Dios mismo había elegido como Vicario de Cristo.
Junto a
todos vosotros, queridos hermanos y hermanas, miembros todos de la Familia Salesiana,
y los jóvenes, alabo y doy gracias al Señor por el grandísimo regalo que nos ha
dado en la persona del Cardenal Jorge Mario Bergoglio, Jesuita, arzobispo de
Buenos Aires, que he tenido la gracia de conocer y tratar personalmente en la
Conferencia General del Episcopado Latinoamericano en Aparecida (Brasil), en la
Beatificación de Zeferino Namuncurá.
La
elección del nombre, Francisco, es ya algo significativo porque recoge, en
cierto modo, algunos de los rasgos característicos de su persona -la sencillez,
la austeridad, la autenticidad- y, al mismo tiempo, es programática pues pone
en evidencia algunos de los elementos que deben definir el rostro de la Iglesia
y su relación con el Mundo.
Antes de
impartir su primera bendición como Pontífice, Él nos ha pedido bendecirle. En
un profundo silencio cada uno, desde el fondo de su propio corazón, lo ha
hecho, dejándose guiar por el Espíritu. Ahora, os invito a invocar, para Él, la
abundancia de los dones del Espíritu, de modo que tenga la Luz para discernir
aquello que el Señor espera de Su Iglesia hoy, y encuentre la Energía para
realizarlo.
Con
espíritu de fe y gran estima y devoción, acojamos al Papa Francisco, como lo
habría hecho Don Bosco y, mientras lo confiamos al cuidado y guía materna de
María, le aseguramos nuestro afecto, nuestra obediencia y la más sincera y
determinada colaboración en este tiempo de Nueva Evangelización.
Roma,13
Marzo 2013
Don
Pascual Chávez V., SDB
PRIMER DISCURSO DEL PAPA FRANCISCO, MUY EMOTIVO